Un tenso episodio ocurrió durante el enfrentamiento entre Boca Juniors y Gimnasia y Esgrima La Plata, correspondiente a los cuartos de final de la Copa Argentina . El caos estalló al inicio del segundo tiempo en el estadio de Newell’s, donde los fanáticos del Xeneize y del Lobo protagonizaron un violento enfrentamiento en las tribunas, lo que obligó a la intervención de la policía y del presidente de Boca, Juan Román Riquelme, quien trató de controlar la situación.
Los equipos de Boca y Gimnasia regresaban al campo para disputar la segunda mitad cuando los problemas comenzaron. Desde la bandeja superior de una de las tribunas donde se ubicaban hinchas de Boca, empezaron a lanzar butacas hacia la sección de los seguidores de Gimnasia. Esto provocó que los aficionados del Lobo intentaran romper un alambrado para enfrentarse con la hinchada rival.
El tipo se bancó el gas pimienta de la cana con el lomo.
— Boca TV (@BocaTeVe) October 24, 2024
Del lado Juan Román Riquelme de la vida, hasta la siguiente vida. pic.twitter.com/Ju1Er2jSlo
Intervención de Riquelme y la policía para parar violencia en la Copa Argentina
La tensión escaló rápidamente, y la situación empeoró cuando La Doce, la barra brava de Boca, derribó un portón y se dirigió hacia la platea con la intención de confrontar a los fanáticos de Gimnasia. Los policías intentaron contener a los seguidores auriazules, lo que resultó en un enfrentamiento directo con la fuerza de seguridad.
En medio del descontrol, la policía disparó postas de goma y lanzó gases lacrimógenos para dispersar a los hinchas, mientras que los jugadores intentaban calmar a los aficionados, acercándose a las tribunas para evitar que la violencia continuara. A pesar de estos esfuerzos, los incidentes no cesaron, y la situación dentro del estadio se tornó crítica.
La barra de Boca, decidida a cruzar la cancha para enfrentarse a sus rivales, se topó con el cordón policial, lo que derivó en una lluvia de proyectiles lanzados hacia las autoridades. La tensión entre los fanáticos y la policía se mantuvo durante varios minutos, complicando la posibilidad de reanudar el partido.
Lo de JUAN ROMÁN, RIQUELME 🙌🏻 cuantos más como él se necesitan en el País. Jugador del pueblo real.
— Manuela Sanchez (@ManuSanchez12) October 24, 2024
Por otro lado, que no pisen nunca más una cancha, ninguno de los inadaptados que no van a ver fútbol sino a hacer plata.
Este muchacho es de otro planeta 👏 pic.twitter.com/zKkLubHCcR
Riquelme y su rol para evitar la suspensión
En este contexto, Juan Román Riquelme, acompañado por Raúl Cascini y Chicho Serna, ingresó a la platea para interceder. El presidente de Boca, con gestos y palabras, intentó disuadir a la barra, que estaba liderada por figuras como Lana Gatica y Topadora Kruger, pidiéndoles que regresaran a sus lugares y evitaran más confrontaciones. Tras varios minutos de conversación, Riquelme logró calmar a los fanáticos, aunque la tensión persistió y las butacas continuaron volando por algunos minutos.
En la tribuna de Gimnasia, varios hinchas resultaron afectados por los gases lacrimógenos, requiriendo atención médica. El cuerpo técnico y médico del equipo platense asistió a los afectados con agua, ayudándolos a recuperarse. Finalmente, después de que la situación se estabilizó y los hinchas volvieron a sus lugares, Riquelme regresó a su palco y el árbitro Jorge Baliño decidió reanudar el partido, que estuvo a punto de ser suspendido.
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