La fascinación por los dragones y su vínculo con los Targaryen ha sido un tema central en el universo de ‘Juego de Tronos’ y en la exitosa serie ‘La Casa del Dragón’. La pregunta de por qué solo los miembros de esta familia parecen poder reclamar dragones ha intrigado a fanáticos y expertos por igual. La respuesta puede rastrearse hasta los oscuros orígenes de la antigua Valyria y los misterios de la magia y la herencia. A continuación te damos todos los detalles.
En la antigüedad, antes de la devastadora Maldición de Valyria, el Feudo de Valyria era un lugar de gran poder, fama por su magia y su dominio sobre los dragones. Este feudo estaba compuesto por varias casas influyentes, algunas de las cuales, como los Targaryen, los Belaerys y el enigmático Aurion, eran conocidas como señores dragones. Estos grupos eran capaces de montar y controlar a los dragones, una habilidad que parecía ser exclusiva de su linaje.
El vínculo entre los hombres y los dragones sigue siendo un enigma. Los Targaryen, quienes lograron sobrevivir a la Maldición de Valyria al establecerse en Rocadragón, se convirtieron en los únicos señores dragones conocidos en el mundo posterior a la catástrofe. Con el tiempo, bajo el liderazgo de Aegon el Conquistador, los Targaryen cruzaron el Mar Angosto y subyugaron los Siete Reinos, montando sus imponentes dragones.
A lo largo de los siglos, la creencia predominante era que solo aquellos con sangre valyria pura podían montar dragones. Sin embargo, la realidad demostró que este linaje no era tan exclusivo como se pensaba. La Casa Targaryen, al interrelacionarse con otras casas y diluir su sangre a través de matrimonios, comenzó a incluir en sus filas a individuos no de alta cuna. En la época de la Danza de los Dragones, Rhaenyra Targaryen, enfrentando la necesidad de más jinetes para sus dragones, optó por reclutar a individuos con ascendencias valyrias, incluso si eran bastardos. Estos nuevos jinetes, conocidos como “semillas de dragón”, rompieron con la tradición de reservar los dragones exclusivamente para la nobleza alta.
Aunque la sangre valyria parecía ser un requisito, la realidad muestra que el vínculo con los dragones puede ser más flexible de lo que se pensaba. La ausencia de ejemplos de jinetes de dragones sin ascendencia valyria en los registros históricos no prueba definitivamente que esta sea una regla absoluta. En cualquier caso, los Targaryen han sido los únicos dispuestos a acercarse a estas criaturas majestuosas, sugiriendo que el verdadero misterio podría residir en su audaz disposición más que en una característica genética específica.
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