La huelga de guionistas en Hollywood ha tomado un nuevo giro con la participación de importantes actores y actrices que se unieron a las protestas el viernes, convirtiéndola en la lucha laboral más grande de la industria en décadas.
Entre los manifestantes se encontraba el actor de “Ted Lasso”, Jason Sudeikis, quien estuvo presente afuera de NBC en Nueva York. Además, el actor de “Lord of the Rings”, Sean Astin, se unió a los manifestantes frente a las oficinas de Netflix en Hollywood.
En el plantón de Netflix, también se sumaron actrices destacadas como Frances Fisher, conocida por sus papeles en “Titanic” y “Unforgiven”, y Fran Drescher, quien además de ser actriz es la presidenta del Sindicato de Actores de la Pantalla-Federación Estadounidense de Artistas de Televisión y Radio (SAG-AFTRA).
La presencia de estos actores y actrices avivó los mítines en los estudios, donde la música resonaba y las aceras estaban llenas de manifestantes.
Desde mayo, cuando comenzó la huelga de guionistas, algunos actores como Mark Ruffalo ya habían expresado su apoyo y se unieron a las manifestaciones. Ahora, con la incorporación formal de 65 mil miembros del sindicato de actores al paro, es la primera vez en más de seis décadas que actores y guionistas se unen en una huelga simultánea.
Ambos gremios enfrentan problemas similares con los estudios y servicios de streaming, especialmente en temas relacionados con contratos, pagos de regalías y regulación del uso de inteligencia artificial en el cine y la televisión.
La huelga ha tenido un impacto significativo en la industria del entretenimiento, provocando la cancelación de estrenos y eventos de alfombra roja, así como la suspensión de programas de televisión y películas.
A pesar de las dificultades en las negociaciones y la falta de un acuerdo, las estrellas de Hollywood han mostrado su firme apoyo a la lucha por condiciones laborales más justas y equitativas para todos los involucrados en la industria del entretenimiento. La huelga sigue sin una fecha de finalización y se espera que las tensiones continúen hasta llegar a una resolución satisfactoria para ambas partes.