El vasto universo de Dune , creado por Frank Herbert, abarca miles de años de historia, consolidándose como una de las sagas más extensas y detalladas de la ciencia ficción. Con su nueva serie de Max, Dune: La Profecía, ambientada diez mil años antes de los eventos de Paul Atreides en Arrakis, se exploran los orígenes de elementos clave en la narrativa, como la hermandad de las Bene Gesserit y el conflicto con las inteligencias artificiales. Entonces, ¿Cómo encaja dentro de la cronología? Sigue leyendo.
El Viejo Imperio y el surgimiento de la Cofradía
La historia de Dune comienza en el Viejo Imperio, una época donde la humanidad logró conquistar las estrellas gracias a los viajes espaciales. Este periodo también marcó el descubrimiento de Arrakis y la especia melange, indispensable para los viajes interestelares. Sin embargo, el Viejo Imperio cayó tras la rebelión liderada por Tlaloc y los Titanes, quienes establecieron su dominio en un tiempo de caos y guerras.
El punto de inflexión en la cronología llega con la fundación de la Cofradía Espacial, evento que divide la línea temporal en dos: Antes de la Cofradía (AC) y Después de la Cofradía (DC). La Cofradía monopolizó el transporte, la banca y los viajes espaciales, instaurando un sistema burocrático que puso fin al desorden del Viejo Imperio.
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La Jihad Butleriana y la prohibición de las máquinas
La serie arranca con referencias a la Jihad Butleriana, un conflicto épico donde la humanidad se enfrentó a las máquinas dominadas por Omnius, un superordenador consciente. Esta guerra, que duró mil años, culminó con la destrucción de Omnius en la Batalla de Corrin (100 AC) y la prohibición definitiva de las inteligencias artificiales. Este contexto explica por qué el universo de Dune tiene un carácter casi medieval, sin computadoras ni robots, pero con una fuerte dependencia de habilidades humanas potenciadas, como las de los Mentats y las Bene Gesserit.
Las Bene Gesserit: protagonistas de La Profecía
La serie se centra en la formación de la hermandad Bene Gesserit, surgida en el 88 AC, cuyo propósito es guiar los matrimonios entre las Grandes Casas y preparar la llegada del Kwisatz Haderach, un ser capaz de ver el futuro y acceder a memorias ancestrales. Desde su fundación, las Bene Gesserit han actuado como asesoras en la sombra, manejando el poder desde detrás del trono.
En La Profecía, los flashbacks muestran a las hermanas Valya y Tula Harkonnen, figuras clave en la juventud de la hermandad. Valya, por ejemplo, es nombrada Madre Superiora en el año 4 AC, consolidando la influencia de las Bene Gesserit en la política galáctica.
La conexión con Paul Atreides
La acción de la serie establece las bases para lo que ocurrirá miles de años después, durante la Nueva Era, donde las casas Harkonnen y Atreides se enfrentarán por el control de Arrakis. Este periodo, conocido como la Gran Guerra de las Especias, es el telón de fondo de las películas de Denis Villeneuve.
Un universo en expansión
El universo de Dune no termina con Paul Atreides. La cronología se extiende cinco mil años más, explorando las aventuras de Leto II, el Dios Emperador, y los conflictos internos de las Bene Gesserit. Con La Profecía, Max amplía este inmenso legado, arrojando luz sobre los eventos que dieron forma a este icónico universo.
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