Desacato en la función pública: La Reforma Judicial y sus implicaciones

En el contexto de la reforma judicial, varios funcionarios han incurrido en desacato, ignorando lo que establece la ley. Esta situación plantea serias preguntas sobre el respeto al Estado de Derecho y el cumplimiento de las normas jurídicas.

Para ponerlo en perspectiva, si una persona común decidiera no acatar ninguna ley, reglamento o autoridad, sería considerada infractora y enfrentaría consecuencias legales. Lo mismo aplica para los servidores públicos, sin importar su rango o nivel. Cuando desobedecen resoluciones judiciales, incurren en desacato, lo que es precisamente lo que algunos expertos aseguran está ocurriendo actualmente.

Recientemente, el Consejo de la Judicatura desatendió una orden judicial que prohibía entregar al Senado las listas de todos los jueces y magistrados del país. Este acto ha sido visto por muchos como un ejemplo claro de desacato, violando la Ley de Amparo, que establece que las personas obligadas a cumplir una suspensión judicial deben acatarla. Como señalan los expertos, las resoluciones de los jueces se deben atacar o acatar, pero no ignorar.

Otro caso que ha generado controversia es el del Instituto Nacional Electoral (INE). Aunque pausó sus actividades relacionadas con la organización de la elección de juzgadores, no se quedó inactivo. En lugar de acatar plenamente las decisiones judiciales, el INE acudió al Tribunal Electoral en un intento por combatir dichas resoluciones. Si bien afirman estar respetando las notificaciones, también esperan la resolución final del Tribunal Electoral.

Sin embargo, expertos señalan que el Tribunal Electoral no tiene atribuciones para revocar este tipo de suspensiones, y una decisión en este sentido podría constituir una grave violación de derechos humanos.

Actualmente, la decisión de 150 jueces que ordenaron frenar la elección de juzgadores sigue en el aire. Para muchos, desconocer estas resoluciones judiciales no solo es una afrenta directa al Poder Judicial, sino también una amenaza seria para el Estado de Derecho en México.

Este tipo de desacato no solo mina la autoridad del Poder Judicial, sino que también pone en riesgo el equilibrio de poderes y el respeto a las leyes fundamentales. El respeto a las resoluciones judiciales es esencial para mantener un sistema de justicia funcional y equitativo. El desenlace de esta situación determinará en gran medida la dirección futura de la reforma judicial y su impacto en el Estado de Derecho.