La guerra en Oriente Próximo ha tomado un nuevo giro con los ataques aéreos lanzados por Estados Unidos y el Reino Unido contra varias ciudades en Yemen controladas por los rebeldes hutíes. La ofensiva, que tuvo lugar en la madrugada de este viernes, marca un significativo acto de represalia tras los continuos ataques de los hutíes respaldados por Irán a buques mercantes en el mar Rojo desde octubre del año pasado.
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En un comunicado oficial, el presidente estadounidense Joe Biden afirmó que los ataques fueron una respuesta directa a los “ataques sin precedentes de los hutíes contra buques mercantes internacionales en el mar Rojo, incluyendo el uso de misiles balísticos antibuques por primera vez en la historia”. Biden destacó que estos ataques hutíes amenazaron la seguridad del personal militar estadounidense, así como la libertad de navegación y el comercio internacional.
La operación militar conjunta impactó objetivos en varias ciudades yemeníes, incluyendo la capital Saná y Hodeida en la costa oeste. Según fuentes locales, los ataques también alcanzaron emplazamientos cerca de lugares de gran importancia cultural e histórica, como la ciudad de Taiz en el centro del país. Altos mandos militares de EE UU indicaron que la acción tenía como objetivo enviar un mensaje disuasorio y no simplemente simbólico.
En un comunicado adicional, el secretario de Defensa de EE UU, Lloyd Austin, señaló que la operación se centró en desactivar radares, sistemas de protección antiaérea, drones y misiles balísticos y de crucero utilizados por los hutíes.
🇺🇸🇬🇧 | AHORA: Estados Unidos y el Reino Unido realizando ataques aéreos que se están llevando a cabo en Yemen, con el apoyo de Canadá, Australia, Bahréin y los Países Bajos. pic.twitter.com/JFPdd8NpCe
— UHN PLUS (@UHN_Plus) January 12, 2024
Los hutíes, que han perpetrado una serie de ataques con drones y misiles en el mar Rojo, han justificado sus acciones como una forma de presionar a Israel para que ponga fin a la guerra en Gaza. Sin embargo, fuentes estadounidenses desmienten esta afirmación, señalando que los hutíes han atacado buques de diferentes nacionalidades sin distinción.
La decisión de lanzar los ataques aéreos se produjo después de una advertencia colectiva de un grupo de países, liderado por Estados Unidos, a los hutíes el 3 de enero. El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución el miércoles pasado instando a los rebeldes yemeníes a cesar inmediatamente sus hostilidades en el mar Rojo.
La operación militar conjunta representa una nueva fase en el conflicto de Oriente Próximo, expandiéndose a territorios fuera de Gaza. A pesar de los esfuerzos diplomáticos y militares de EE UU para evitar una escalada en la región, los ataques aéreos muestran la determinación de las potencias occidentales para salvaguardar la libertad de navegación en una de las rutas marítimas más cruciales del mundo.
Hasta el momento, no se han detectado movimientos de represalia por parte de los hutíes, pero la situación sigue siendo tensa, y varios países han expresado su preocupación por una posible escalada del conflicto en la región.
