La BOMBERA chihuahuense Belém Alvarado revela su AMOR por una noble profesión

Ser bombero es una vocación que requiere un profundo espíritu de servicio, donde el corazón se pone por delante de uno mismo. La abnegación es un componente esencial para los bomberos, quienes asumen voluntariamente el compromiso de servir de manera desinteresada y con la firme convicción de ayudar a la ciudadanía en todo momento, sin esperar nada a cambio. Aquí tienes la información.

El trabajo de bombero implica numerosos sacrificios y esfuerzos. La disciplina es fundamental en los cuerpos de bomberos, ya que deben cumplir las órdenes emitidas por sus superiores sin excusas. En términos de disciplina, honor y eficiencia, no hay términos medios: o se cumple o no se cumple. Los bomberos están para auxiliar a las personas en situaciones de emergencia, cuando necesitan ser rescatadas o asistidas, y debido a la dificultad o especialidad de estas situaciones, ellos son los llamados a actuar.

“Lo que me motivó a seguir en esta profesión es esa sensación incomparable que se siente al poder contribuir para salvar una vida”, comenta uno de los bomberos. “Esa sensación es inexplicable, ya sea al salvar una vida humana o animal, es algo que no se puede describir”.

Muchos bomberos coinciden en que ser bombero es un estilo de vida, un camino estricto lleno de desafíos y pruebas, pero extremadamente satisfactorio debido a la labor desinteresada que se realiza en favor de las personas en cualquier parte del mundo. La grandeza del bombero radica en estar presentes cuando y donde sea necesario, de forma gratuita y abnegada, para ayudar a quien lo requiera.

El valor principal que aplican los bomberos en su día a día es el amor por servir al prójimo. Siempre están en la primera línea del riesgo, donde todos los demás se retiran ante el peligro, y ellos son los que avanzan hacia él. “¿Qué más valor que arriesgar y dar tu vida por una persona a la que no conoces?”, reflexiona uno de ellos. “Más que un trabajo, es una vocación”.