El Hotel Princess Acapulco, uno de los destinos turísticos más emblemáticos de la zona, quedó reducido a escombros tras el paso del Huracán Otis , un fenómeno meteorológico categoría 5 que azotó el Pacífico mexicano con vientos devastadores de hasta 270 kilómetros por hora.
A través de las redes sociales, se difunden impactantes videos que documentan la magnitud de los estragos sufridos por el hotel. Las imágenes muestran un panorama desolador, con habitaciones demolidas, un lobby destrozado y vehículos dispersos en diversas áreas del complejo.
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La edificación, diseñada por los arquitectos William Rudolph y Leonides Guadarrama, abrió sus puertas al público en 1971, evocando la majestuosidad de una antigua pirámide azteca. Sin embargo, la fuerza inusitada del huracán Otis ha dejado al hotel convertido en un montón de escombros.
🔴 #Noticias | Estos son los daños que sufrió el Hotel Princess Acapulco tras el paso del #huracán #Otis.
— TV Azteca Chihuahua (@AztecaChihuahua) October 27, 2023
Uno de los centros de hospedajes más emblemáticos de #Acapulco quedó devastado y prácticamente se ha convertido en un edificio de escombros.
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El huracán Otis, catalogado como el más poderoso en la historia del Pacífico mexicano, dejó a su paso una estela de destrucción sin precedentes. Con vientos que superaron los 270 km/h, arrasó con todo a su paso, dejando a Acapulco prácticamente incomunicado.
Según estimaciones de la Secretaría de Turismo de Acapulco, en el momento del impacto, el estado registraba una ocupación hotelera del 50%, lo que añade un componente crítico a la situación. Turistas que se encontraban en la zona describieron la experiencia como una “noche de terror”.
El Hotel Princess Mundo Imperial de Acapulco, situado frente al mar y enmarcado por 480 hectáreas de jardines y palmeras, cuenta con mil 101 habitaciones distribuidas en 15 pisos. Su colosal estructura, que una vez fue sinónimo de lujo y confort, hoy yace en ruinas.
Acapulco, un baluarte turístico de renombre internacional, enfrenta ahora el desafío de recuperarse de la furia de Otis, en lo que se prevé como una larga y ardua tarea de reconstrucción. Los esfuerzos por evaluar los daños y asistir a la población afectada están en marcha, a medida que la magnitud de la tragedia comienza a desvelarse.
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