Geólogos de la Universidad de Colorado Boulder de Estados Unidos, descubren un inusual ecosistema “alienígena” en la puna de Atacama, en el desierto de Argentina y Chile, que podría dar información importante de como se originó la vida en la tierra y en marte.
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En este desierto, ubicado a 3.660 metros sobre el nivel del mar, se encontró un sistema de doce lagunas, rodeadas de llanuras de sal. Bajos sus aguas cristalinas, los científicos encontraron montículos de rocas de 4 metros de ancho cubiertos por microbios.
Un ecosistema desconocido según los expertos, estas estructuras se asemejan a las primeras formas de vida conocidas en la tierra, denominadas estromatolitos.
Se cree que estas existieron durante el período Arcaico temprano, que se distinguía por la falta de oxígeno en la atmósfera terrestre. “Esta laguna podría ser uno de los mejores ejemplos modernos de los primeros signos de vida en la Tierra”, señaló el geólogo Brian Hynek, quien indicó que este entorno, al que nombró como “alienígena”, no tiene parecido con ningún otro. “Es simplemente sorprendente que todavía se puedan encontrar cosas así como estas en nuestro planeta”, enfatizó.
Los estromatolitos se hacen actualmente en distintos hábitats marinos, como el que se localiza en las Bahamas. Sin embargo, en comparación con sus antepasados primitivos, que llegaban a medir hasta 6 metros de altura, los estromatolitos modernos son más chicos, además de que crecen de manera lenta, alimentándose de granos de arena y detritos que flotan en el océano.
Los especialistas explicaron los estromatolitos descubiertos en Atacama, están constituidos en la mayoría de yeso, un mineral presente en las antiguas comunidades de estos microorganismos, aunque no esta presente en sus homólogas más contemporáneas. “Creemos que estos montículos en realidad están creciendo a partir de microbios, que es lo que estaba sucediendo en los más antiguos”, dijó Hynek, hasta el momento, no se sabe cómo estos organismos lograron reproducirse en un entorno tan agresivo.
Según los expertos, estas estructuras podrían brindar detalles acerca de como surgieron los primeros signos de vida en la tierra. Si la vida alguna vez evolucionó en Marte hasta el nivel de los fósiles, habría sido así", agregó Hynek, señalando que “comprender estas comunidades modernas en la Tierra podría informarnos sobre lo que debemos buscar cuando busquemos características similares en las rocas marcianas”.
